La idea es poder pintar el exterior de una casa con un producto que genere electricidad en contacto con la luz, y esta electricidad se pueda utilizar como fuente de energía dentro de la casa.

Un grupo de investigadores de la universidad anunció que están trabajando para obtener una «pintura solar» que utiliza nanopartículas semiconductoras para generar energía. A través de esta investigación, pretenden ir más allá de la tecnología solar basada en silicio.

El enfoque de la investigación es un nuevo material que utiliza nanopartículas de dióxido de titanio recubiertas de sulfuro de cadmio. Estas partículas se suspenden en una mezcla de agua y alcohol para formar una pasta, que se recubre con un material conductor transparente y se expone a la luz para generar electricidad.

Cuando hablamos de recubrimientos solares fotovoltaicos, el secreto técnico es el uso de «puntos cuánticos», que son productores de energía de nanopartículas. Los puntos cuánticos se suspenden (diluyen) en una mezcla de agua y alcohol y se convierten en pintura solar. Luego se puede distribuir a cualquier superficie conductora que recolecta energía sin ningún equipo especial.

El creador de este «revestimiento solar» explicó que la eficiencia alcanzada hasta ahora es de solo el 1%, que es significativamente menor que el 10% al 15% de las células de silicio tradicionales. La ventaja de la «pintura solar» es que se puede producir en grandes cantidades y el precio es mucho menor que el de las células solares. Aseguraron que el desafío es mejorar la eficiencia para asegurar que la aplicación sea importante a la hora de abordar las necesidades energéticas futuras.

El Centro de Nanotecnología de la Universidad de Notre Dame es uno de los principales centros de nanotecnología del mundo. El objetivo general de su trabajo es estudiar la comprensión, manipulación y control de las propiedades de los materiales a nanoescala.

Cuidar nuestra salud y respetar el ecosistema son dos buenos motivos para decidir pintar la vivienda apostando por los mejores productos entre pinturas y revestimientos ecológicos.

Utilizar componentes de alta calidad significa aumentar su durabilidad y mejorar nuestra salud, reduciendo así nuestra huella ecológica, disminuyendo su impacto en el planeta y mitigando la parte de gases de efecto invernadero asociados a los quehaceres humanos. Esto conlleva un ahorro económico doble: alargando el tiempo de repintado y reduciendo los gastos médicos por problemas de salud.